La boda de Katixa y Erik es de las que se pueden definir como muy suyas. Ante la imposibilidad de celebrar la ceremonia donde Katixa quería, en Lekeitio, decidieron realizarla en la empresa familiar de Ispaster, Roldán Ardoak, una bodega que adaptaron y decoraron a su medida.
El resultado fue espectacular, con la ayuda de Amaia de Nuvola Rouge crearon diferentes ambientes, uno muy romántico para la ceremonia de la boda y otro más chic (y acogedor) para el coctel y baile.
Fue una boda en la que nadie se sentó a la mesa, del catering se encargó La Hambroneta y crearon diferentes puntos con distinta comida para todos los gustos, desde el stand de los quesos hasta un puesto de palomitas!!
Despues de un baile donde los asistentes lo dieron todo, el broche final lo pusieron los farolillos flotantes y fuegos artificiales.